Importantes rachas de fuertes vientos -que superan los 100 kilómetros por hora- y lluvias continuadas en el tercio norte es lo que caracteriza el tiempo a partir de este miércoles en España provocado por una ciclogénesis explosiva, cuyo centro se sitúa en el sur de las islas Británicas.
En las costas se esperan olas de entre 4 y 5 metros de altura y las lluvias oscilan entre 20 y 50 litros por metro cuadrado de acumulación en 24 horas.
En esta ocasión a esta ciclogénesis o borrasca explosiva se le ha puesto el nombre de 'Petra'.
Un total de 30 provincias del norte y noroeste peninsular están en alerta amarilla o naranja por lluvias, viento o fenómenos costeros.
Concretamente estarán en alerta naranja (riesgo importante) por vientos Cantabria, Burgos, León, Palencia, Navarra, La Coruña, Lugo y Asturias. En alerta amarilla (riesgo) por vientos permanecerán Zaragoza, Huesca, Teruel, Gudalajara, Madrid, Ávila, Palencia, Segovia, Burgos, Cantabria, Salamanca, Cáceres, Soria, León, Valladolid, Zamora, Orense, Pontevedra, La Rioja, Álava, Vizcaya, Guipúzcoa.
Mientras, por fenómenos costeros estarán en alerta naranja La Coruña, Pontevedra y Asturias y amarilla Cantabria, Gerona, Lugo, Vizcaya y Guipúzcoa. Finalmente, permanecerán en alerta amarilla por lluvias las provincias de La Coruña, Orense y Pontevedra.
Finalmente, estarán en alerta amarilla por lluvias las provincias de Ávila, Cáceres, Salamanca, Ourense, Pontevedra y La Coruña
Entre el jueves y el viernes la ciclogénesis se irá extendiendo hacia el este y las temperaturas subirán el jueves en la Península y Baleares, lo que favorecerá la formación de tormentas.
El viernes lloverá débilmente y los cielos estarán nublados en casi toda la Península. Mientras, Canarias, queda al margen de toda este fenómeno.
Las ciclogénesis explosivas más importantes y recientes que han afectado a España fueron la provocada por el ciclón extra-tropical Klaus, durante los días 23, 24 y 27 de enero de 2009. En esa ocasión el fenómeno produjo graves daños en el norte de España y el sur de Francia, donde también se cobró varias víctimas mortales.
La última vez se registró prácticamente un año después, los días 26 y 28 de febrero de 2010, y en ese caso las zonas más afectadas fueron Canarias, Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, norte de Castilla y León y zonas altas de montaña
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